viernes, 19 de febrero de 2010

El Zapping de Hablemos en serie. Series Delicatessen.

Para cerrar este improvisado Zapping hoy vamos a echarle un vistazo a las series de mi actual parrilla que me están dejando las mejores sensaciones. Son ese grupo de series que tienen tanta calidad que uno no hace más que desear que llegue el día en que regresen con un nuevo episodio de su dulce y/o amargo sabor a grandeza. Reconocemos a estos manjares televisivos porque sus imágenes se nos quedan en la retina durante días o semanas como si fuesen intensas experiencias que hayamos vivido nosotros mismos. A demás su imperdurable eco de excelencia trasciende la pantalla y el momento para alojarse para siempre en lo más alto de nuestra historia seriéfila. Como pronto comprobareis no todos tenemos la misma percepción ni sentimos el mismo entusiasmo con respecto a este tipo de series (ni falta que hace). Lo importante en cualquier caso es que seamos capaces de comunicar nuestro desprecio, indiferencia y/o pasión por ellas de la manera más sincera, honesta y respetuosa posible, enriqueciéndonos todos de esta manera con esa hermosa disparidad de opinión que nos acaba distinguiendo a los unos de los otros. Dejo ya de parafrasear y doy comienzo este último Zapping……

No voy a extenderme demasiado en la valoración de esta primera temporada de The Shield, porque para tal finalidad ya estoy preparando un post personal que le de toda la justicia que se merece. Lo que si voy a hacer en su lugar es daros unas pequeñas pinceladas con las sensaciones (pasado, presente y futuro) que me ha dejado tras de sí su primer ansiado y esperadísimo visionado. Mis referencias hacia ella siempre han sido tan excelentes que muchas veces sus expectativas pueden llegar a traicionar. En el caso de Vik Mackey y sus colegas de trabajo de momento no pueden ser más entusiastas y satisfactorias Si lo que me espera por delante está a la altura de lo visto, la serie acabará sin duda entre mis favoritas, si es capaz de superarse a sí misma podría entrar hasta en mi top Ten. (Hasta aquí puedo leer).

Voy por la mitad de la segunda temporada de Oz, y no me cansaré de repetir bien alto y claro que esta es una de las mejores series de la historia de la televisión. Los que habéis visto ya todas sus temporadas sabréis el por qué de mis entusiastas palabras, los que no lo habéis hecho deberíais replantearos de inmediato vuestras prioridades seriéfilas, dándole de inmediato una oportunidad a esta intensa e inmensa serie irrepetible. Este segundo encarcelamiento está siendo tan complejo y fascinante como lo fue el primero. Cada uno de los personajes de siempre evoluciona de la manera más realista y perturbadora posible haciendo avanzar el relato con la misma tensión y solidez de antes. En cuanto a sus nuevas adquisiciones, además de aportar estupendas interpretaciones, también van dejando tras de sí un inteligente reciclado de tramas que hacen de su claustrofóbica historia una nueva bocanada de aire tan oscuro como enriquecedor.
fff
Lo reconozco y estoy orgulloso de ello, soy un fan incondicional de True Blood. Lo de incondicional siempre irá entre colmillos y comillas dado que tampoco suelo cegarme con mi propia pasión, pero lo de orgulloso lo reitero porque si hoy en día hay una serie que me hipnotice y me embriague más y mejor (con permiso de Lost) esa es sin duda la de los vampiros de Alan Ball. La lluvia de opiniones encontradas que cayó después de que finalizara su última temporada me había preparado para cualquier tipo de desvarío argumental que pudiera encontrarme en este nueva asalto vampírico. Y si, es cierto, la cosa empieza a desmadrarse casi desde el minuto uno de su premiere. Lo bueno es que mi lado más naif, gamberro y fantasioso podrá desfogarse de lo lindo con unas tramas que prometen ponerse tan extremadamente cachondorras y divertidas como igualmente perturbadoras y épicas. En definitiva un festín de sangre y emociones de lo más sabroso y sugerente.

Y en lo más alto de este Zapping como no podía ser de otra manera la serie de la que muchos estamos total y “perdidamente” enamorados hasta la médula. Como cualquier enamorado que se precie apenas podemos ver los defectos de nuestra amada, y babeamos y suspiramos cada vez que por ejemplo Locke mueve una ceja. Nuestro amor va más allá de pensamientos racionales y encaprichamientos pasajeros porque después de más de cinco años de idilio uno ya se ha acostumbrado a sus pequeños tropiezos. Y es que como en toda relación estable sus muchas virtudes superan con creces a sus defectos y todas ellas han acabado formando parte de un todo del que uno nunca se cansa de experimentar y disfrutar. Sus indescifrables misterios son un espejo de su oscura personalidad y sus magníficos personajes forman ya parte de nuestra familia, por eso ¡en nombre de Jacob! No intentemos buscar más allá de lo que realmente son, dejémosles que se despidan como se merecen.

En el próximo post hablaré largo y tendido sobre lo que me está pareciendo esta última temporada de Lost, hasta entonces disfruten de su propio Zapping.

6 comentarios:

  1. Yo no puedo con True Blood por más que me lo propongo, The Shield está siendo una serie increible y trepidante que te pone la adrenalina a mil, y Oz es una de mis pendientes.

    ResponderEliminar
  2. Satrian: True Blood desde luego es una serie muy arriesgada y diferente, yo disfruto como un enano con tanto desparrame, aunque esta segunda temporada está siendo algo irregular, lo mismo me fascina un episodio que el siguiente me deja tan frio como uno de sus vampiros. The Shield si sigue por este camino acabará siendo una de mis grandes seguros, y Oz simplemente no la puedes dejar pasar, absolutamente brutal en todos los sentidos.

    ResponderEliminar
  3. HOla Watanabe,acabo de entrar a tu blog.
    Aquí tienes a otro medio fan de True Blood. Es dífícil entender esta serie tan bizarra y pintoresca pero por no se qué, seguimos viendo la serie a pesar de los personajes y el argumento en sí.
    Con Lost estoy empezando ahora. El hecho de ser un novato en series pues me ha hecho no poder estar comentando a la vez que vosotros.
    Oz , ya imaginaba que era una buena serie pero por el hecho de ser larga pues la tengo en la cola.
    Y The Shield, tengo vistos cuatro capitulos y la verdad es que por ahora pese a estar bien la he dejado aparcada por Lost.
    Saludos y si quieres te invito a mi blog:

    http://ponunaserieentuvidaymas.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  4. Conquer: Bienvenido a este microcosmos bloguero. Lo bueno de ser novato es que tienes todo un mundo de series que descubrir, aunque también hay mucho curro por delante. Pasaré por tu blog y te comentaré algo.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  5. Tu listado de series delicatessen coincide con mis gustos excepto por True Blood (fui incapaz de engancharme a ella).
    Hace apenas dos semanas que acabé Oz y la impresión que me dejó no pudo ser mejor. Quizá, si tuviera que hacerle una crítica, es que la trama acaba haciéndose repetitiva, cosa que no pasa con los personajes (siempre crecen y evolucionan). Espero tu crítica cuando la termines, así como con The Shield (si no entra en tu top-ten entrará en tu top-fifteen).

    ResponderEliminar
  6. Estar en las nubes: Su primera temporada me fascinó por completo, y su segunda también lo está haciendo aunque sea un poco más irregular en su argumento. Lo cierto es que con seis temporadas encerrados en una cárcel es complicado que algunas partes de la trama no terminen por repetirse un poco, ya te comentaré cuando la vea completa. De momento un autentico y claustrofóbico disfrute. En breve publicaré una entrada con mis impresiones sobre el primer zarpazo de The Shield.

    Saludos a todos.

    ResponderEliminar