jueves, 24 de diciembre de 2009

Su nombre es Reaper.

La verdad es que cuando apareció por la parrilla americana este proyecto televisivo de Kevin Smith no supe muy bien como posicionarme ante él. Como cineasta había alternado trabajos brillantes como Persiguiendo a Amy o Clerks, con trabajos completamente prescindibles como Una chica de Jersey o Jay y Bob el Silencioso contraatacan. Estos altibajos en su trabajo dejaban en su conjunto una gran sensación de ambigüedad creativa que sembraba demasiadas dudas. Pero por otro lado también es cierto que todas sus películas siempre han tenido el suficiente humor irreverente, el cual podía venirle muy bien a una serie de semejantes características. El hecho es que la serie estaba ahí, y ahora nos tocaba a nosotros juzgarla para bien o para mal......
jjjjj
¡Posibles spoilers!

En los primeros episodios Reaper no pasaba de ser una comedia simple y ramplona, con algo de chispa humorística, pero con muy poca mecha narrativa que ofrecer. Sus simpáticos pero anodinos personajes y sus repetitivas situaciones se hacían tan poco estimulantes que estuve muy cerca de mandarla al diablo (nunca mejor dicho) y buscarme otra serie de ese estilo que se tomara su propuesta de mero entretenimiento superficial un poco más en serio. La estructura de esos capítulos estaba tan esquematizada que era evidente que aquello no podía ir demasiado lejos sin causar a la larga en el espectador una rotunda sensación de apatía. Y tanto su protagonista (Sam) como sus dos amigos inseparables (Sock y Benji), parecían destinados a ser personajes de rápida combustión en una función que moriría sin remedio. Sin embargo hacia la mitad del show (aproximadamente), Reaper empieza a aportar algo más que simples cacerías de diablos. A partir del momento en que sus protagonistas se independizan parece que con ellos también lo hicieran sus encorsetados guiones. Desde ese instante la serie comienza a entrelazar sus historias autoconclusivas de siempre con tramas más serializadas donde el desarrollo de su mitología crece en complejidad y diversión. Y es definitivamente con la llegada de sus nuevos y diabólicos vecinos gays, cuando Reaper se acaba instalando en ese lugar cómodo y agradable, donde habitan las series que pretenden dejarte algo más que una mera sonrisa en la cara.

Con la segunda temporada Reaper demuestra que ya ha perdido todos sus complejos y que se encuentra a gusto con ese papel de comedia juvenil y cachonda. El diablo interpretado por un magnifico Ray Wise (el padre de Laura Palmer en Twin Peaks) está más carismático y terroríficamente seductor que nunca, y los receptáculos son cada vez mas disparatados aportando frescura y originalidad al conjunto. La relación entre Sam y Andi pasa por sus momentos más delicados dejando su necesaria dosis de amorío post adolescente, y las nuevas parejas de Ben y Sock aparecen para deleitarnos con las tramas más graciosas y ocurrentes de esta nueva temporada. Pero es en su nueva historia serializada donde una vez más encontramos todo el jugo que estábamos esperando. Por un lado la aparición del nuevo hijo de diablo ofrece algunos giros interesantes y su personaje rivaliza de maravilla con nuestro protagonista haciendo de sus enfrentamientos los momentos más sugestivos. Por otro, la desesperada obsesión de Sam por escapar de la esclavitud a la que está sometido por el diablo, nos llevará hasta un emocionante final, en un duelo sin precedentes inusitado e intenso, pero más abierto de lo esperado víctima de una diabólica cancelación prematura.

Es evidente que Reaper no pasará a la historia por ser una comedia revolucionaria y mucho menos innovadora. Tampoco dispone de un humor excesivamente elaborado, y sus historias no son profundas ni reflexivas. Sus personajes nunca llegan más allá de lo entrañable, y su producción no pretende en ningún momento deslumbrar. Lo que sí os aseguro que ofrece Reaper es un montón de humildes y divertidos episodios, perfectos para pasar un buen rato de genuino y endiablado entretenimiento.

4 comentarios:

  1. realmente no pasa de ser un mero entretenimiento. lo que más me gusta es el diablo. Sam me parece un poco soso.

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  2. Yo lo intenté, y lo dejé antes de que se pudiera poner interesante, ademas no aguantaba al gordo.

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  3. LA ULTIMA TEMPORADA DE DEXTER ES GENIAL.
    Como se te ocurre poner cmo HOT a Rita????

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  4. Enara: La verdad es que ese actor encaja perfectamente con el diablo. De su mirada desprende algo maligno.

    Anónimo: Entiendo que te aburriera sus inicios son bastante sosos. Pero si tienes un poco de paciencia se convierte en un buen entretenimiento.


    Fievel: Desde luego sus primeros episodios son fantásticos. En cuanto a Rita está claro que no es un personaje especialmente atractivo, (sé que más de una la odiáis), pero hay que reconocer que en esa foto.......

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